¿Qué tan lejos está el interés de la profesión?
Al ingresar al campus universitario, somos recibidos con la inmersión de varias disciplinas. Cada individuo posee intereses y talentos únicos y, frente a este diverso mundo de conocimiento, no podemos evitar reflexionar: ¿deberíamos buscar experiencia en un campo específico o ampliar nuestros horizontes en múltiples temas? ¿Hasta qué punto está la brecha entre nuestros intereses? y nuestra profesión elegidan?
La búsqueda de experiencia es un consejo común que escuchamos en el ámbito académico y profesional. Enfatiza la profundidad del conocimiento en un campo especializado y la importancia de perfeccionar las habilidades profesionales. Se nos dice que poseamos una habilidad o talento único, que nos convirtamos en expertos en un dominio particular, para poder establecer una posición firme en el mundo profesional. Sin embargo, ¿significa esto que debemos limitarnos a un solo dominio y ignorar otros conocimientos??
El aprendizaje de base amplia es igualmente indispensable. Significa que debemos profundizar en múltiples disciplinas, no limitarnos a nuestra propia especialización y ampliar nuestros horizontes de conocimiento. La asignación adecuada del tiempo es crucial; debemos evitar estar demasiado parcializados o descuidar algún campo en particular. Usando una metáfora, podemos entender vívidamente la desventaja de especializarse únicamente sin ser diverso: es como una persona con una sola pierna tratando de competir en un concurso de patadas, destinada a perder.
Pero, ¿podemos realmente lograr experiencia y amplitud de conocimientos? Necesitamos considerar dos aspectos: en qué trabajo podemos sobresalir y qué trabajo puede hacer la mayor contribución a la sociedad. Ambas consideraciones son cruciales, pero parecen dar lugar a un estado de parálisis de decisiones..
Cuando se trata de elegir una carrera, podemos extraer algunas ideas de la vida de Maimónides. Maimónides era principalmente un médico dedicado a curar a otros, trabajando diligentemente de 10 a 12 horas al día. Además de su práctica médica, fue autor de numerosas obras filosóficas durante su tiempo libre. Maimónides creía que uno debía vivir una vida plena. Nos enseñó que si pasamos nuestros días haciendo cosas que no nos interesan, ¿cómo podremos tener éxito? No podemos resistirnos a nuestras verdaderas preferencias en lo más profundo de nuestro corazón. Lo que no nos gusta, por mucho que nos esforcemos, no lo podemos hacer bien. Por tanto, el primer paso es involucrarnos en actividades que realmente nos interesen..
A continuación, debemos aprovechar nuestras fortalezas y hacer aquello en lo que sobresalimos. Cada individuo tiene ventajas únicas y debemos combinar nuestros intereses con nuestras fortalezas y considerarlas de manera integral. Por ejemplo, si eres una persona con una altura de sólo 1,5 metros y aspiras a sobresalir en la cancha de baloncesto, entonces debes aprovechar tus puntos fuertes y elegir un campo que se adapte a ti.
Al mismo tiempo, no debemos descuidar las consideraciones éticas. Aunque perseguimos intereses y fortalezas personales, también debemos contemplar cómo podemos contribuir a la sociedad. El sentido de responsabilidad social es un factor crucial a considerar en la elección de carrera. Sin embargo, no debemos ser demasiado idealistas, creyendo que el mundo está corrupto y que sólo nosotros somos puros y no estamos sincronizados con el resto del mundo. El mundo puede ser mundano, pero podemos encontrar nuestro valor en medio de lo mundano.
La brecha entre intereses y profesión no es insuperable. No debemos sacrificar la amplitud por la experiencia ni la experiencia por la amplitud. Uno debe participar en actividades que realmente les interesen, aprovechando sus fortalezas y realizando un trabajo práctico para llevar una vida plena y significativa. Al elegir una carrera, debemos perseguir tanto los intereses como las fortalezas personales y al mismo tiempo considerar cómo podemos contribuir a la sociedad. De esta manera, podemos lograr un equilibrio entre intereses y profesión, allanando nuestro camino hacia el éxito.